Dime, ¿qué pensabas cada vez que me veías?, ¿me viste al menos una vez? No tengo el recuerdo de tus ojos en mis ojos, ni de tus historias contadas por tu propia fe. Dime, ¿qué esperabas al encontrarme? supongo que en verdad creíste que sería muy fácil, que me olvidaría de todo; pues no, mi memoria está dañada, pero el corazón es quien no olvida. Dime, ¿qué buscabas, qué querías?
Te di la oportunidad de deshacerte de mi. No te entiendo, ¿porque sigo soñándote a pesar del frío de un adiós? Fue un adiós en el que nunca me dijiste que no, nunca me dejaste ir del todo.
¡Basta de engaños! porque la sonrisa falsa insulta y no le miente a nadie. Eres un pésimo actor, nada sabes fingir. ¡Mírame de cerca, atrévete a ver mi rostro! sé que no eres tan valiente como dices.
Lloré cientos de noches por la partida de tu voz, me asfixié entre las cobijas y mi propio llanto. Hoy, ¿qué tengo a cambio? un "te amo" falso.
Dime, ¿qué esperabas que pudiera ser?, ¿me amabas... de verdad me amabas?
Por favor dime, ¡¿qué buscabas, que querías?! tú mente no la sé leer.
Te soñé otra vez. No recuerdo qué, y no importa tampoco. Pero cada sueño es una carta, una lágrima desperdiciada, una soga al cuello.
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